Diseño y creación de mascota para GARDEN HOTELS.
En 2014 tuve la oportunidad de realizar uno de los proyectos más bonitos en los que había participado hasta la fecha. Me enteré de que la cadena Garden Hotels, con sede en Inca (Mallorca) buscaba a un ilustrador para diseñar una mascota. Querían dar más relevancia a un miniclub para niños en sus hoteles así que no me lo pensé dos veces y contacté con ellos. En la primera reunión que tuve con mi contacto en el hotel, ya tenían una idea muy clara “quiero que tenga un aspecto dinámico y atlético. Garden Hotels promociona diferentes eventos deportivos y quiero que también pueda usarse para ellos. Y quiero que sea un lince.” ¡Sin problemas! Me puse a trabajar an personajes dinámicos, estilizados y con proporciones de adolescente.
Llegó el día de la presentación. Tenía 3 propuestas montadas en cartón pluma y me siento frente a 2 jefes de la cadena. Cuando termino mi presentación, las críticas no podían ser peores. “No parece achuchable.” Ése fue el resumen. El trabajo de 3 semanas echado a perder por unas indicaciones equivocadas. “Además, – añadieron – ¿qué pinta un lince en Mallorca?” Vamos, no acerté ni una.
Con las nuevas pautas empecé desde un enfoque totalmente distinto. Empecé por fauna local – voltor, ferreret, puput, sargantana y jeneta – y usé proporciones mucho más infantiles. En esta ocasión el éxito fue rotundo. La gineta arrasó por goleada. El argumento era que los mamíferos suelen parecer más agradables. Así empecé a desarrollar la mascota que por aquél entonces no tenía nombre. El nombre lo escogieron los seguidores de las redes sociales y finalmente se le bautizó como Woogi.
Además de la ternura del personaje en si y de las cerca de cien ilustraciones que tuve que hacer del personaje en diferentes actitudes, lo más emocionante para mi fue que mi mascota substituyó a la anterior, Gardenito. No me mal interpretéis, el motivo no es la competencia. Gardenito lo había diseñado Miquel Àngel Coll, un profesor de animación tradicional que tuve y ahora un buen amigo. Esta casualidad para mi tiene un simbolismo muy relevante y nostálgico a la vez.